SALMÓN

El placer de saborear un pescado peculiar de muchas formas distintas.

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Propiedades

El salmón es un pescado azul rico en vitamina D y B.

La vitamina B3, es una de las vitaminas más importantes para nuestro organismo. Por una parte, ayuda al correcto funcionamiento de nuestras neuronas. También colabora en la producción de hormonas esteroideas y nos ayuda a que nuestra piel tenga buen aspecto. Otra de sus funciones es ayudar a nuestro cuerpo a eliminar toxinas y mantener el nivel de colesterol a raya. La vitamina B6 se elimina por la orina, por lo que es necesario que la repongamos cada día. Participa en la creación de glóbulos rojos, ayuda a que las células de nuestro cuerpo reciban oxígeno, refuerza el sistema inmune y sintetiza varios neurotransmisores. La vitamina D ayuda a la metabolización del calcio y a mineralizar los huesos.

El salmón contiene en menor medida, vitaminas A,,E,K

También contienen minerales y proteínas como por ejemplo: Hierro, Calcio, Potasio, Yodo, Zinc, Magnesio, Sodio o Fósforo. Pero lo más importante del salmón es su riqueza en ácidos grasos Omega-3.

Beneficios:

Todos sabemos que los ácidos grasos Omega-3 nos aportan el principal beneficio del salmón. Nuestro cuerpo absorbe fácilmente sus proteínas.

Los ácidos grasos  del salmón son beneficiosos para ayudarnos a luchar contra el colesterol. Fortalece los músculos de nuestro corazón, nos ayuda a bajar la presión sanguínea e, incluso, evita que las arterias se endurezcan como sucede con el paso de los años.

Además, es necesario recordar que los ácidos Omega-3 nos ayudan a mejorar la memoria, el consumo de este pescado recude el riesgo de desarrollar enfermedades tan temidas como el Alzheimer y el Parkinson.

Estos ácidos, combinados con las vitaminas A y D, cuidan nuestro sistema nervioso, frenando los síntomas de envejecimiento y ayudan a prevenir los coágulos sanguíneos, disminuyendo así el riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares.

Su consumo acelera nuestro metabolismo, lo que se traduce en una mayor absorción de azúcar, esto hace que el nivel de azúcar en sangre baje. Y, por consiguiente reducimos el riesgo de sufrir diabetes.

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